Carlos Manzo tenía protección federal: Harfuch confirma vulnerabilidad


Uruapan, Michoacán (cortesía Agencia Esquema) — Entre lágrimas, consignas y muestras de indignación, cientos de ciudadanos, familiares y colaboradores despidieron al alcalde Carlos Manzo, asesinado la noche del sábado a unos metros de la Pérgola Municipal, donde este domingo se le rindió un homenaje póstumo.
El cuerpo fue velado en una funeraria sobre la Avenida Juárez, donde el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla acudió brevemente para expresar sus condolencias. Sin embargo, fue recibido con abucheos y reclamos por parte de ciudadanos que lo responsabilizan por la crisis de inseguridad en el municipio. Ante la tensión, el mandatario se retiró rápidamente para evitar confrontaciones.
El cortejo fúnebre recorrió las principales calles del centro —Juárez, 5 de Febrero, Madero y Cupatitzio— hasta llegar a la Pérgola Municipal, donde cientos de uruapenses esperaban con flores, velas y pancartas. A su paso, se escucharon aplausos, gritos de justicia y consignas como “Manzo vive, la lucha sigue” y “Presidente, presidente”, en un ambiente marcado por la consternación y el duelo colectivo.
Durante el homenaje, al pie de la estatua de José María Morelos decorada con elementos de la Noche de Muertos, el subsecretario de Gobernación y hermano del alcalde, Juan Daniel Manzo Rodríguez, aseguró que “Carlos luchaba por un Uruapan mejor para nuestros hijos” y que “su voz resonará en cada exigencia por un mejor México”.
Gracia Quiroz, pareja del edil, expresó entre lágrimas que “mataron al único presidente que se atrevió a hablar con la verdad”, y llamó a la ciudadanía a no rendirse: “Defendamos a nuestros hijos con uñas y dientes, como lo hubiese querido Carlos”.
El féretro fue colocado en la Pérgola Municipal, rodeado de coronas y flores, donde la ciudadanía expresó su cariño y exigió justicia para esclarecer el crimen y castigar a los responsables.
