Migrantes denuncian adeudo de salarios en programa de empleo temporal en Coatzacoalcos


Sayda Chiñas
Coatzacoalcos, Ver.- Migrantes denunciaron que el gobierno federal no les ha pagado dos meses de salario por el trabajo de limpieza de espacios públicos en el municipio de Coatzacoalcos, esto como parte del programa emergente de ayuda que estuvo ejecutando la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR).
Los migrantes afectados indicaron que, durante seis meses, estuvieron trabajando en un programa de empleo temporal de Bienestar, en el cual eran contratados a través de un módulo establecido en el gimnasio de la colonia Nueva Obrera, cerca del patio de Ferrocarriles.
Detallaron que durante varios meses estuvieron realizando obras de limpieza y chapeo en instalaciones deportivas del ayuntamiento de Coatzacoalcos, y les pagaban cinco mil pesos al mes, con lo cual se sostenían.








En el mes de febrero les dijeron que se iban a retrasar los pagos por el tema de la veda electoral, pero ya pasaron las elecciones municipales y no hay una respuesta de las autoridades.
“Nos dijeron que íbamos a trabajar medio tiempo y lo tomamos porque no podemos irnos a trabajar a otro lado, porque no nos dan trabajo. Las rentas son carísimas, la comida para nosotros es carísima. Cuando no pagamos el cuarto, nos corren y toca dormir en la calle.”
Un grupo de migrantes hizo una protesta para denunciar la falta de pago, y desde hace una semana el módulo de la COMAR fue cerrado. Cuando se acercan al gimnasio donde estaban, los amenazan los policías municipales.
“Nosotros pedimos que nos paguen los dos meses que nos deben y nos den una explicación si estamos retirados del programa. Queremos algo coherente.”
Los migrantes señalaron que los quieren criminalizar, ligándolos a actos delictivos, pero ellos se mantienen en Coatzacoalcos tratando de juntar dinero para avanzar a otras entidades, ya que consideran que en Veracruz no hay oportunidades de trabajo y los salarios son muy bajos.
Para los afectados, el sueño americano se acabó, ya que reconocen que las redadas de deportación en Estados Unidos ya son muy peligrosas, pero no pueden retornar a sus países por las condiciones de violencia que existen.
En este programa de Bienestar para los migrantes tenía trabajando a más de 100 personas. Algunas de ellas se cansaron de esperar su pago y se fueron; otras, como este pequeño grupo, busca establecerse en México y está esperando sus permisos de trabajo para cambiar de estado.