Comuneros del istmo ganan  litigio agrario a una empresa de generación de energía eólica

Oaxaca.- Los comuneros de Unión Hidalgo ganaron un litigio  a la empresa española Renovalia Reserve –y su filial mexicana que suministra energía a Grupo Bimbo, el tribunal agrario  confirmó el derecho al territorio y ordenó a la empresa a desocupar los terrenos donde había colocado un parque eólico, los cuales indebidamente “rentó” como propiedad privada.

Durante más de 10 años, los comuneros de  este municipio del Istmo de Tehuantepec, estuvieron peleando por sus tierras comunales y recuperaron su territorio, informó la organización Proyecto de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (ProDESC).

Los ejidatarios iniciaron una disputa  con la empresa Desarrollos Eólicos Mexicanos S.A de C.V. (Demex), filial mexicana de la española Renovalia Reserveen el año 2006, cuando representantes de la compañía  los  buscaron  para prometerles dinero y beneficios a cambio de contratos que les permitiera colocar sistemas de generación de energía eólica.

Los representantes de esta empresa reclutaron  a gente de la zona para que ellos hablaran con ellos en  su lengua  materna, el zapoteco y  les presentaron  los contratos de arrendamiento, solo que no les expusieron  los efectos de  la operación de los ventiladores sobre sus cultivos y su propia calidad de vida.

Los comuneros intentaron  acabar con los contratos de arrendamiento, pero no recibieron apoyo de las autoridades estatales y federales, por eso ellos llevan varios años  en litigio para recuperarlas.

Cuando los comuneros de Unión Hidalgo empezaron a manifestar su inconformidad, buscaron asesoría legal para tomar cartas sobre el asunto. En ese momento, se percataron que los empresarios se habían coludido con funcionarios públicos para que se hicieran escrituras de la propiedad comunal, y emprendieron una batalla legal de varios años.

Las empresas que operan los generadores  tumbaron árboles para crear caminos y vialidades, además  aves  y murciélagos cambiaron  sus rutas  de vuelo, también registraron contaminación de un  río local y los pozos artesanales.

El aceite utilizado para los aerogeneradores se derrama   y filtra  hacia  los campos de cultivo, sin mencionar que la operación de estos aparatos produce contaminación auditiva y lumínica.

Las  organizaciones cercanas al caso y de la zona del Istmo de Tehuantepec esperan que se asiente un precedente jurídico que impulse la recuperación de terrenos comunales, que fueron ocupados de manera ilegal, así como el derecho a un territorio sin las afectaciones que causan los parques eólicos al medioambiente y a la sociedad.